Seguro que alguno de Uds. pensará que un servidor es un auténtico pestiño, que no deja de anunciar su retirada pero no acaba de irse, a semejanza de los villanos de los guiñoles, que resucitaban una y mil veces hasta que eran definitivamente decapitados por el héroe.
El caso es que me acaban de conceder otro galardón, en este caso el segundo premio del prestigioso certamen “la barca de la cultura” (http://www.labarcadelacultura.com), auspiciado por algunos de los portales culturales más importantes de habla hispana. Se puede leer aquí.
El cuento versa sobre la materialización de los sentimientos, y cómo la distancia puede trasmutar (algo de alquimia encierra el proceso) el amor en idolatría. A falta de otra imagen, el protagonista acaba adorando un paquete de salmón putrefacto, símbolo de la mujer que lo ha abandonado.
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9 comentarios:
Juan Carlos, también por aquí:
Enhorabuena y a seguir.
Buena tarde y buenos cuentos.
Gracias sinceras, Dani.
Un abrazo.
Enhorabuena, amigo. El relato es sensacional. Como decimos en el Sur, estás que te sales de la pelleja...
Pues el cuento ya era añejo, Julio, y había pasado por otros certámenes sin pena ni gloria.
Gracias miles.
Pues me parece estupendo.Que sigas escribiendo post por motivo de premios muy merecidos :0)
Un abrazo
De nuevo ¡Enhorabuena amigo! Espero que en el siguiente post nos comuniques un premio con aportación económica, que seguro te será de ayudita en estos tiempos que corren.
Un beso!
Pues enhorabuena de nuevo. Y ya se está convirtiendo en una costumbre.
Un abrazo
Y yo que te daba por retirado me llevo la sorpresa de ver varias entradas que no he leído.
Mi enhorabuena por el premio, conozco este relato tuyo hace tiempo ¿recuerdas? y ya te dije en su día que era bueno de verdad.
Un abrazo
Gracias a todos por vuestras felicitaciones. A ver si me empieza a premiar la cosecha del 2009.
Saludos.
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