El hombre, en la superficie de la tierra, no tiene derecho a dar la espalda e ignorar lo que sucede en el mundo.

Fiódor Dostoievski (El jugador)

miércoles, 11 de agosto de 2010

Dinero no habrá, pero para tonterías…

16.000 millones de euros, una cifra que marea si la traducimos a las antiguas pesetas. A eso ascienden los beneficios de las farmacéuticas que fabricaron la vacuna de la epidemia inexistente, la gripe A, la misma de la que tenemos millones de dosis pudriéndose en nuestros almacenes.

A mí, personalmente, lo que me satisfaría sería condenar a la directora de la OMS, Margaret Chan, a la ministra de los bichitos alevosos y prohibiciones tabaqueras, “la Trini”, y a cuantos de una forma y otra, por interés o por pura estulticia, contribuyeron a este dislate, a trabajos forzados de por vida, hasta que restituyeran una fracción de lo que nos ha costado la broma.

5 comentarios:

mujer prevenida vale por dos dijo...

La "Trini" ha tenido arrestos para decir que lo de las vacunas no es problema del Ministerio de sanidad porque la sanidad está transferida. Toma pato de goma!

Jamás creí en ésta pandemia! lo que tengo clarísimo es que cuando los mismos grupos empresariales tienen controlados los medios de comunicación las farmacéuticas la bolsa y la OMS; y son los que crean los virus me rio de sus vacunas de sus pandemias y de los juicios...
Y si no, mira a Naomi Campbel y esas sucias piedras... otra que insulta nuestra inteligencia.

Anónimo dijo...

los pliticos siempre tan lucidos..

Juan Carlos Garrido dijo...

Cauta y Valiosa Mujer:
Uno de las cualidades imprescindibles para medrar en política es saber echar balones fuera.

Jordim:
Bienvenido a esta casa.

Saludos a todos.

dany dijo...

Ayer, mientras paseaba por el paseo marítimo de Melilla vi dos chavales que tiraron dos latas de refresco al suelo. Los invité a que las recogieran y las depositaran en la papelera que tenían casi a mano. Incrédulos, se rieron de mí y me dijeron que qué iba a ser de los barrenderos si nadie ensuciaba. Yo les menté la familia y me quedé pensando que vivimos en una sociedad de gilipollas donde necesitamos basura para que otros trabajen y enfermedades para que algunos se enriquezcan.

Saludos.

Juan Carlos Garrido dijo...

Me temo que lo de los muchachos es mera carencia de educación.

Saludos.