Esta mañana lo escuché en la radio, y no hay más que rezarle un poco a San Google para comprobar que diversos portales están plagados de anuncios en este sentido.
¡Menos mal que Solbes empieza a recortar sus previsiones, pues la economía va tan mal que hasta el sexo se paga en especie! La idiosincrasia española hace que, aunque no tengamos qué llevarnos a la boca, siempre hallemos algo para vicios, y si estos se empiezan a adquirir mediante trueque, es que la cosa es preocupante de veras.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Son tantas las cosas que en esta vida se hacen a cambio de sexo...
Octavio:
Lo raro no es que se pague el sexo, sino con qué.
saludos.
¿Sería más digno un anillo?
:-))))
¿Pero no se decía que (...) menos que un casado?
¿En qué quedamos?
Publicar un comentario