El hombre, en la superficie de la tierra, no tiene derecho a dar la espalda e ignorar lo que sucede en el mundo.

Fiódor Dostoievski (El jugador)

martes, 25 de noviembre de 2008

Intransigencia.

El hecho de que uno, que nunca ha sido especialmente religioso, coincida, aunque sólo sea alguna vez, con el pensamiento de los Obispos, sin duda es preocupante y puede llegar a ser sintomático de que, quizás, vaya siendo demasiado mayor.

Aún así, es cierto que a un cierto sector de la progresía más rijosa y gazmoña le sale urticaria ante la vista de un crucifijo o de una placa con el nombre de una santa, ¡vade retro! Lo más curioso, es que estos mismos integristas laicos no se alteran ante la vista de los símbolos de otras religiones, que además representan la sumisión del género femenino.

Lo peor de todo es que, con la que está cayendo (o justamente por eso), se desperdicie tanto tiempo y energías en estas minucias.

4 comentarios:

Thailand dijo...

Pues eso mismo pienso yo. Estamos perdiendo el tiempo y jugando con fuego.
Si se prohíben los crucifijos que se prohíban los velos islámicos, que si no vamos a entrar en un terreno muy peligroso del que nos va a ser muy difícil salir.

Esto al margen de lo de la crisis, que es el gran problema en el que todos debían estar ocupados.

Julio dijo...

De acuerdo contigo, Juan Carlos. Precisamente yo también hablo en mi blog de la intransigencia.

Filisteum dijo...

Hay goboiernos, como este, que te hacen defender hasta la fe que no tienes.

Manda cojones...

Juan Carlos Garrido dijo...

En efecto, este gobierno va a acabar por inventar la "fe laica"

Saludos a todos.